El subsuelo de Egipto es una fuente inagotable de hallazgos arqueológicos. El último, siete tumbas que incluyen una rara colección de decenas de gatos momificados, así como también varios escarabajos, además de más de un millar de amuletos y otros objetos. Los restos más antiguos datan de hace unos 6.000 años. El descubrimiento es fruto de más de seis meses de excavaciones en la necrópolis de Sakkara, situada a unos 30 kilómetros al sur de El Cairo y donde fueron enterrados durante siglos los más prominentes dirigentes y nobles de Menfis, la capital del Antiguo Egipto.
Según informó el ministro de Antigüedades, Jaled al-Enany, en una rueda de prensa celebrada la semana pasada, tres de las tumbas pertenecen al Nuevo Imperio (entre 1550 y 1069 a. C.), y otras cuatro, al Imperio Antiguo (entre 2681 a. C. y 2181 a. C). De estas últimas, la más importante pertenece a Khufu-Imbat, que ejercía de supervisor del palacio real durante el final de la V Dinastía. Este periodo, comprendido entre 2500 a. C. y 2350 a. C., se inició poco después de la construcción de las pirámides de Giza. Los arqueólogos todavía no han abierto la tumba, que parece haber permanecido lejos del alcance de los ladrones de tesoros.
La existencia de las momias de gatos y escarabajos, sobre todo en la cantidad hallada, no es habitual. En el Antiguo Egipto, los animales momificados eran ofrendas a los dioses, mientras los seres humanos lo eran para preservar su cuerpo para el más allá. “La [momificación] de los escarabajos es algo único. Algo realmente raro … Hace días, cuando descubrimos los sarcófagos, estaban sellados con dibujos de escarabajos. Nunca había oído algo así antes”, declaró Mustafá Waziri, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades.
Las excavaciones, situadas en las inmediaciones del recinto funerario del faraón Userkaf, el primero de la V Dinastía, en la necrópolis de Sakkara fueron interrumpidas en 2013 para clasificar los numerosos objetos recabados desde 2008. Las autoridades egipcias han autorizado la continuación de sus trabajos en la zona, que consideran que puede esconder tumbas y objetos de gran valor arqueológico. Pero no son las únicas excavaciones en el país, que ha visto en los descubrimientos arqueológicos una excelente herramienta de propaganda para relanzar su maltrecho sector turístico. “Este es el primero de tres nuevos hallazgos en otras provincias de Egipto que serán anunciados antes del final de 2018”, informó el ministro al-Enany.
Además de varias docenas de momias de gatos, se ha hallado un centenar de estatuas doradas en forma de gato hechas de madera, y otra esculpida en bronce dedicada a la diosa Bastet. Asimismo, entre una colección de un millar de amuletos, frascos canópicos, herramientas de escritura y canastas de papiros, entre los objetos más valiosos presentados a la prensa figuran una estatua policromada en forma de cobra hecha de madera y un sarcófago de cocodrilo.
Fuente: RICARD GONZÁLEZ – El País